nuestro proyecto se creó a comienzos de esta pandemia. identificamos un problema muy abstracto que se agravó en estos tiempos. el distanciamiento social, supo afectarnos a todos en menor o mayor medida, con empatía, entendemos que a todos nos afecta diferente. a las relaciones, la mente, lo físico y a nuestras vidas en general. cuando la tecnología no solo conectaba, sino que también sofocaba, utilizamos la participación de voluntarios y su cooperación para la resolución del problema. y es así como nacen las buzonearas comunitarias a modo de primera iniciativa. mediante mensajes, para ayudar a reducir de alguna manera el distanciamiento social incorporando la dimensión emocional. así, disfrutamos de relaciones sociales a través de un espacio de interacción más ameno y no virtual. las cartas son genéricas, firmadas o anónimas, positivas y escritas a mano. con creatividad y comunicación, los voluntarios y líderes logramos un proyecto innovador, viable, adaptable y afectivo.