A gritos el mundo pide respuestas ante una crisis que jamás habíamos vivido, algunos juzgan y señalan a las potencias políticas, otros cuestionan los gustos culinarios y otros simplemente no saben qué camino tomar, sin embargo es una realidad que no perdona al negador. El Covid-19 viene con sus tristezas dejando alegrías, muertes pero a su vez esperanza, cultivando mentes solidarias, con sueños que ojalá esta vez sí sean cumplidos; bien dijo Mario Mendoza, soy de todos y no soy de nadie… Por supuesto respondemos como equipo, con ideas frescas, pensadas desde las problemáticas inmarcesibles, que vivimos a diario antes de habernos puesto el tapabocas y lavarnos las manos cada dos horas, una problemática que se apellida desempleo. En Latinoamérica la pasamos mal como dice René, tan mal que tenemos la valentía de crear ideas para salir de esta crisis lo mejor posible. El mundo ha parado, la economía ha tenido que disminuir su andar y ahora que lo sabemos… ¿Qué vamos a hacer al respecto?