Para fidelizar el talento humano dentro de una organización se propone involucrar y comprometer a cada empleado con la misión de la empresa, que, con algunas excepciones, no debería ser otra que prestar un servicio a la comunidad -local, nacional o global-, cuya prestación debe generar unos recursos -Utilidad-. Se sugiere entonces concientizar en primer lugar sobre el servicio que se presta a la comunidad y su consecuencia lógica La Utilidad, y no lo contrario -primero utilidad y luego servicio- o solo utilidad como único fin o propósito. Si a cada empleado se le inculca que su trabajo es importante ya que sirve a la comunidad, encontrará significado a su labor y adquirirá sentido de pertenencia. Quien encuentra valor a su labor desarrolla sentido de pertenencia, y ambos -valor y pertenencia- generan fidelización para con la organización, en cuyo caso ya no habrá "empleados" sino miembros activos de un equipo de trabajo con un propósito y entrega común.